SALVÁNDOSE DOS

Fue como aquella noche en Balí. Tembló como en un desfile de gaviotas. No eran las calles de Madrid, pero sí fue suficiente para no dormir. Te salvaste tú mientras ella reía en cada luna nueva, y en el clic de sus maletas cerradas tú besabas dos bocas en busca de su ausencia. Y pasaron un par de años entre discos de antes y copas vacías. Suena John Boy, pero esta vez, sin salida de emergencia. Olvidó decirte de una nueva versión, Imaginarte hoy suena mejor. Quedó pendiente El primer día de Marc Levy, ¿Estarás ahí? De Guillaume Musso siempre tuvo la respuesta. Demasiado para contar, más para recordar. Y al final, Ya verás, en cualquier bar dando saltos de alegría. Te recomendaría una tarde de peli, El Atardecer, después, cuando anochezca, la Estrella Polar seguirá ahí, brillando alto, entodosloslugares.

El sol y la luna se besan la cara.